Momento de la Intervención

(Los que leáis mi bog por primera vez, os aconsejo que antes de este escrito leáis la entrada de  preparacion Intervención Clipaje Aneurisma  ya que esta es la continuación  de “ mi aventura” como yo lo llamo)

Y el gran día de ingresar llego!!!! Recuerdo aquel domingo 24/02/2013 mi hermana conduciendo de camino al hospital y yo a su lado contemplando y observando muy atenta cada paisaje que mis ojos podían  retener, con el fin de poder memorizarlos , ya que mi ingreso al hospital era inminente y no sabía cuando ni como saldría, así que posiblemente esos paisajes los necesitaría recordar en algún momento crítico de “mi aventura”. Me sentía como si estuviera a punto de a tirarme por  un precipicio sin saber que habría en el fondo de el, aunque tenía claro que me tiraba con paracaídas. 

Es de aquellas situación que recordaré toda la vida, mi hermana y yo con lágrimas en los ojos intentando ser fuerte, el momento de la verdad había llegado. La verdad es que parecíamos «Thema & Louise»  (Es para poner un poquito de humor, ya que me ha quedado muy dramático, aunque fue tal y como lo cuento)

A comparación de mi ingreso anterior para la Angiografía Cerebral, esta vez no fue tan impactante. Supongo que eso es lo que te da la experiencia, cuando ya sabes la dureza que se vivé en la novena planta  de neurología tu mente ya está mas preparado para ver esas escenas.

No puedo entender como  esa misma tarde a 12 h de mi intervención,  uno de los momentos más  importantes de mi vida, como fui capaz de estar  conversando incluso llegue a  reírme en compañía de mis amigos, aquellos que semanas anteriores habían estado a mi lado apoyándome y aguantando mi dolor y miedos. El momento había llegado…. PERO YO NO ESTABA SOLA…. tenía a todos ellos y a muchísima gente que con sus mensajes me iban dando una fuerza que iba absorbiendo por segundos. Creo que eso es lo que me hizo conseguir esa paz interior. Aunque unas horas antes un grupo de médicos entraran en mi habitación para explicarme  TODOS  LOS RIESGOS DE MI INTERVENCIÓN y firmar un papel en el que decía que podía fallecer, quedarme secuelas de movimiento de memoria o del habla.

Cuando me despedí de ellas y me quedé en la habitación a solas con mi hermana es cuando me  di cuenta que todo mi trabajo realizado durante semanas estaba funcionando ( dicho trabajo lo explico en la entrada anterior) . Acepté a dejar mi vida en manos de profesionales y del destino, ya solo me quedaba  la aceptación y serenidad y estaba orgullosa de cómo lo estaba llevando.

 Y EL GRAN DIA LLEGO!!!!

A las 6 de la mañana llego el barbero para afeitarme la cabeza, os aseguro que en ese momento no era lo que más me importaba pero tengo que decir que agradezco al  médico tan profesional y seguro de su trabajo que no le molestaba el pelo y por tanto podía llegar al aneurisma sin raparme, simplemente con afeitar la zona donde abriría ya era suficiente.  Así que tal y como me dijo él, comenté al barbero que el doctor había dado instrucciones de que no era necesario y que el pelo me lo rapaban en quirófano.

 Es cierto que cuando estás en esa situación el pelo es lo de menos lo único que deseas es que todo salga bien y el pelo vuelve a salir. Pero por  otro lado, me considero afortunada ya que es una situación por la cual no quería pasar. Me afeitaron solo  en la zona de la cicatriz. Al tener el Aneurisma en el lado derecho a la altura de la oreja, mi cicatriz es como una “ele” desde la frente hasta la oreja pero a los quince  días ya a penas se veía. Creo que era de las pocas personas de toda la planta que pude librarme de esa situación tan desagradable. Esto lo explico por si estáis a punto de pasar una situación como esta, que se lo comentéis al médico, quien sabe!!!  a lo mejor  una preocupación menos.

 Vuelvo a repetir que lo del pelo no es lo importante en ese momento, pero a la semana tuve que presenciar  como a  “mi compi de habitación” con 37 años le afeitaban el pelo y en ese momento lloraba ella, lloraba su marido y lloraba yo. Ella repetía “si ya sé que el pelo crece y lo importante es la intervención…. Pero tendré que tomarme mi tiempo para  aceptarlo ya que es difícil de aceptar” yo intente darle soporte y ánimos como pude…. Pero creo que tenía razón.

Bueno volviendo a mi situación. A las 8 vino el celador a buscarme y empezaba «la función»,  a mis hermanas las dejaron bajar conmigo.  Os prometo que no sé de donde saque las fuerzas, ni como lo conseguí pero me enfrentaba al momento mas grave de mi vida y estaba serena, tranquila, y con fuerzas. No recuerdo en que pensaba  pero lo que sí que sé, es que me sentía fuerte y preparada.

En el momento que cruzas la puerta de quirófano y te despides de tus hermanas la cosa cambia!!! Supongo que cuando realmente te ves sola ante este momento es cuando te sale todo, empecé a llorar sin consuelo. Tengo que dar gracias a las enfermeras que me atendiera (de las enfermeras hablaré más adelante ya que considero que es un sector poco valorado para el papel tan importante que realizan) me consolaron con mucho cariño, mientras me ponían unas medias en las piernas para no tener una trombosis. Y aun con mis lloros, en el fondo muy en el fondo de mi interior sentía mi serenidad.

Me metieron en quirófano y a partir de aquí pasaron 6 horas de mi vida que no se donde estuve, supongo que mi subconsciente estaría luchando por salir de esta situación y poder despertar, pero tengo que decir que yo no recuerdo nada.

Preparación Intervención Clipaje Aneurisma

Ayer  fue mi cumpleaños, se que este año más que nunca debería celebrarlo ya que soy afortunada porque en mi primera intervención salio  todo muy bien, pero al estar a medio camino de esta situación no estoy lo suficientemente recuperada moralmente como para celebraciones.

Lo que sí que me gustaría es compartir con vosotros la intervención quirúrgica con Clipaje en el aneurisma de la Carótida interna derecha con diámetro de 4 mm y cuello de 5 mm. Dicha intervención consiste en sujetar el aneurisma con un clip de titanio. El motivo de que sea una intervención  quirúrgica y no a través del cateterismo es debido a que el cuello del aneurisma es muy ancho y si la realizaban a través del sistema de  embolización (colocándome una maya)  podía no quedar del todo bien sujeta ya que el cuello era muy ancho. Por tanto, era necesario realizarla a través de la cirugía, era más arriesgado pero a la vez con mayor probabilidad de éxito para que quedará totalmente cerrado y así la sangre poder circular correctamente por el cerebro.

Antes de la intervención:

Una de las cosas que he experimentado es que es cierto eso que dicen “que la vida te puedo cambiar en milésimas de segundos”. Recuerdo la sensación de desesperación enfrente de la Neurocirujana cuando abrió mis resultados de la resonancia y dijo: “Ostras!!!! tienes 4 aneurismas cerebrales, vete  a un hospital público a tratarlos ya que tienen que ser intervenidos»  

El primer dolor que tuve que pasar es saber que tenía la misma enfermedad que tuvo mi madre y encima con un final terrible. Sería imposible describir los sentimientos y el sufrimiento que viví esos dos meses, ya que el dolor era doble saber que tenía una situación crítica  y por otro lado  revivir todo lo que viví cuando era pequeña.

La parte positiva es que soy una persona práctica y de recursos, así que   pronto empecé  “mi búsqueda” y “preparación” para afrontar dicha situación. Lógicamente este camino no lo hice sola, pedí ayuda a gente preparada para poder orientarme.

Podría escribir líneas y líneas explicando cómo fue esta experiencia, pero como tampoco quiero que esto sea muy largo hablaré de lo que considero más importante:

1. Búsqueda de información

Una de las cosas que me ayudó  a afrontar esta sensación de «caída al vacío»  fue buscar información sobre los “aneurismas” y técnicas de intervenciones.

Creo que cuanta más información se tenga de la enfermedad mejor puedes afrontarla. Los médicos y amigos siempre aconsejan que no busques por Internet, ya que no todo lo que se publica es cierto. Pero si se sabe buscar, siempre encuentras páginas médicas donde explican muy bien lo que te sucede. Supongo que depende de cada persona  pero a mí me fue muy bien.

Por supuesto que lees cosas muy fuertes, pero creo que saber la verdad  es el primer paso para poder prepararte psicológicamente, incluso para afrontar los aspectos más duros que pueden suceder en la intervención. No es fácil de asimilarlo  ni de aceptarlo pero si de prepararte para afrontarlo.

A parte de todas las webs médicas que encontré sobre “las intervenciones de los aneurismas” encontré un documento distinto a todos, que me ayudo muchísimo.

Guía del paciente para la recuperación del tratamiento de aneurisma cerebral “ de The Brain Aneurysm Foundation (Fundación del Aneurisma Cerebral

http://www.bafound.org/sites/default/files/BAF_Recuperacion_Book.pdf

Os lo recomiendo, ya que trata la enfermedad con un  enfoque médico pero a la vez desde  la parte humana del paciente incluso habla de cómo la familia puede afrontarlo. Tanto de aneurismas rotos como no, de cómo afrontar la intervención y como superar las secuelas que te pueden aparecer.

A veces leo de nuevo esta guía ya que padezco las secuelas físicas y psicológicas del post-operatorio y  porque debo  prepararme para las nuevas intervenciones que me esperan de aquí a unos meses.

En concreto la  intervención del clipaje consistía en:

Se considera una cirugía abierta, es decir, que es necesario cortar el cráneo para realizar la microcirugía. hará una incisión por debajo de la línea del cabello o en la parte posterior de la cabeza, según la ubicación del aneurisma. De allí se extrae una sección o porción de hueso, para exponer el tejido cerebral. El aneurisma es entonces sujetado con un minúsculo clip de titanio, La porción de hueso se vuelve a colocar en su lugar y la herida se cierra.

Lógicamente mis miedos fueron en aumento, estaba totalmente bloqueada, a veces pensaba que eso no estaba sucediendo que un día despertaría y todo habría sido un sueño, pero no fue un sueño sino una prueba que me puso la vida  o quizás una segunda oportunidad para seguir viviendo, todo depende del razonamiento positivo o negativo que le quieras dar a los hechos. No sé si siempre se puede encontrar la parte positiva a los pero creo que la actitud de uno mismo es importante,  ya que hay veces que no se  puedes cambiar la realidad  por tanto hay que aprenden a vivir con ellas. Así que decidí aceptar mi destino!

2. Contactar con los mejores Especialistas.

Gracias a gente o “angeles” que van apareciendo en tu vida, los cuales son capaces de hacerte favores a cambio de nada, tuve la suerte de poder  visitarme con uno de los mejores médicos de toda España,  incluso se comenta que son de los mejores de Europa, exactamente habló de los neurocirujanos del  Vall d’Hebron de Barcelona. De  esta manera me aseguraba un % grande de posibilidades de que la intervención fuera un éxito. Creo que es importantísimo ponerte en mano en los mejores especialistas, ya que  al fin y al cabo, tu vida la dejas en sus manos.

3. Prepararme psicológicamente.

Me enseñaron a aceptar mi realidad, aceptar mis aneurismas y mi intervención y mi trabajo consistió en afrontarla de la mejor manera.

Aprendí a que es posible soltar una sonrisa y a ser fuerte en medio de la peor tormenta, a saber sufrir y llorar pero sin dejar de ser positiva, a sentir tanto miedo que te paraliza el pensamiento pero sin perder la esperanza. Lo único que sé es que ante situaciones así tú y solo tú decides como puedes o quieres vivirlas. Son lícitos todos los pensamientos que  pasan por la cabeza pero tú decides cuales te sirven  para tirar adelante y  que pensamientos aparecen, los sientes durante unos instantes y luego los sueltas ya que no son reales, simplemente suposiciones negativas para ti.

Fue un camino duro, lleno de mucha desesperación, pero una cosa tenía muy clara  lucharía como una jabata durante esas horas de riesgo en la que mi vida estaría en peligro ya que mi  subconsciente recordaría estas palabra : Quiero vivir!!!!.

Trabajé como conseguir la serenidad en medio de ese Kos, de este desasosiego, pánico.  Mi único objetivo era bajar a quirófano con serenidad, una palabra que creo que deberíamos usarla más en nuestro día a día, ya que esta serenidad ayuda a poder enfrentar  muchas situaciones de la vida.

Aprendía a saber  respirar, puede que alguno os parezca tonto pero de verdad que es muy importante la respiración para conseguir la tranquilidad. Centrarte solo en escuchar tu respiración ayuda a controlar los ataques de pánico, como mínimo a mi me ayudaba.

4. Enfrentarme a la muerte

Sé que puede sonar muy muy muy  fuerte, pero he aprendido que es un tema un poco tabú, incluso a la gente le da miedo  hablar, pero es una realidad que nos tendremos que enfrentar todos tarde o temprano. Yo le tenía mucho miedo y está claro que yo no quería que llegara mi momento pero si tenía que llegar yo no podría hacer nada para luchar contra ella, así que tuve el valor de intentar aceptarla, cogerla de la mano y decirme:”si no sale bien es porque mi momento ha llegado, ya que yo no puedo elegir quedarme o irme, por tanto ante una situación así solo queda aceptar dicha posibilidad. Puede parecer algo muy impactante y no digo que yo quería que llegara, pero es una realidad. El momento de cada uno está escrito y creo que es lo único en esta vida que no podemos cambiar….todo lo demás SI.

Pero tenía hasta la oportunidad de prepárame a ella, ya que creo que es triste  la gente que se ha ido sin poder decir a los demás lo mucho que les quieren o no poder pasar los últimos días con sus seres queridos o irse con cuentas pendientes por solucionar. Por tanto, en la medida que pude y como supe hacerlo mis ultimas semanas antes de la intervención me dedique a eso a solucionar cosas que me quedaban por solucionar y rodearme de la gente que quiero.  Que conste que no quiere decir que pensaba que me iba a morir, pero lo que sí que tenía claro era que en el momento que entrara a quirófano quería dejar este tema zanjado.

5. Una técnica que también me aconsejaron fue la de Anclar “una imagen

Retener una imagen que te dé esa serenidad y bienestar que quería obtener.  Días anteriores me fui a ver “una salida de sol” en medio de ese mar profundo contemplaba  un sol rojo intenso que se asomaba con una fuerza y grandeza que sentí que me daba los “buenos días”, lo retuve en mi memoria, retuve el paisaje, las emociones, las sensación que me transmitieron. Y así en los momento mas tensos y difíciles de afrontar desde mi ingreso hasta mi salida del hospital intentaría recordarlo para trasladarme a ese momento y dejar de sufrir situaciones duras. Y así me dormí en el momento que me pusieron la anestesia.

6. Estar bien conmigo misma

Otra cosa que aprendí es que el apoyo de tu familia, amigos y profesionales es el motor para poder llevar esta situación. No obstante, hay una realidad y es que estas tu sola en la vida. En el momento para el que me estaba preparando, estaría yo sola. Así que me preparé para saber afrontarlo únicamente conmigo misma. Me  preparé para estar orgullosa de quién era y como lo estaba llevando todo.

Aunque para ser justa, diré que el  pensar en la cantidad de gente que en  ese momento tan crítico estaban pensando en mi fue un gran consuelo. Os juro, que notaba las energías de todos ellos, sabía que la lucha era mía pero a la vez con tanta gente apoyándome y en ese mismo instante cada uno de ellos me mandaba su fuerza y apoyo. Eso es muy grande, bonito y te ayuda a conseguir esa serenidad.

Lógicamente deben existir muchos recursos más profesionales y eficaces, yo simplemente quiero compartir los que utilicé yo, cuando sientes que el mundo se te cae encima…tienes que aprender a reacción.

Sobretodo quiero hacer hincapié  que esta preparación no lo hubiera conseguido sin gente profesional que te ayuda a conseguir dichos propósitos.  Aquellos amigos que tienen una capacidad y un DON para ayudar y dar  magníficos consejos. Tampoco lo hubiera conseguido sin todas aquellas personas que con su apoyo y calor humano estuvieron desde el principio a mi lado. Y sobretodo y fundamental…. sin mi familia!!! sin ella no hubiera sido posible, es tan grande el apoyo, fuerza, unión, amor y muchos más adjetivos que he recibido de todos los miembros de mi familia. Una de las cosas positivas que me llevo de esta experiencia es sentirme afortunada de mi familia, amigos y tanta gente que me quieren. Sin todos y cada uno de ellos no lo hubiera conseguido.

Para finalizar este apartado, quiero compartir   un documento que me ayudo mucho a familiarizarme con la enfermedad. Es de “la asociación Brain Aneurysm” la única asociación que encontré. (Si alguien sabe de alguna mas que me informe por favor).

Da explicaciones no tan técnicas sino mas enfocadas al paciente. En ella os explica:

Opciones de tratamiento de aneurismas cerebrales.
Tratamiento de clipaje, Tratamientos alternativos (embolización)
Cuidados posoperatorios
Conexión familiar

http://www.bafound.org/sites/default/files/BAF_Introduccion_Aneurismas_Bk.pdf

 

Búsqueda de información antes de la intervención

 Es cierto eso que dicen de que la vida te puedo cambiar en milésimas de segundos.

Recuerdo la sensación de desesperación cuando estas en el despacho de una Neurocirujana y al abrir los resultados de la resonancia dice: “ Ostras !!!! tienes 4 aneurismas cerebrales.Vete directa a un hospital público a tratarlos ya que tienes una situación de alto riego”

Una de las cosas que me ayudaron a afrontar esta angustia y miedo fue buscar información sobre lo que tenia, ya que hasta dicho día la palabra “Aneurisma” era desconocida para mi. Cosa que cambio con los días.

Creo que cuanta mas información se tenga de la enfermedad mejor puedes afrontarla.Los médicos y amigos siempre aconsejan que no busques por Internet, ya que no todo lo que se publica es cierto. Pero si se sabe buscar, siempre encuentras páginas médicas donde explican muy bien lo que te sucede.

Supongo que depende de cada persona, pero a mi me fue muy bien saber en qué consistian mis intervenciones y a que riegos me exponía. Por supuesto que lees cosas muy fuertes, pero creo que saber la verdad  es el primer paso para poder preparte Psicologícamente.Incluso para afrontar lo peor del caso si te sucediera.

A parte de todas las webs médicas que encontré sobre “ las intervenciones de los aneurismas” encontré un documento distinto a todos, que me ayudo muchísimo.

Guía del paciente para la recuperación del tratamiento de aneurisma cerebral “ de The Brain Aneurysm Foundation (Fundación del Aneurisma Cerebral

http://www.bafound.org/sites/default/files/BAF_Recuperacion_Book.pdf

Os lo recomiendo, ya que trata la enfermedad desde un enfoque médico pero, a la vez, lo trata desde la parte psicológica de los pacientes incluso familiares. Tanto de aneurismas rotos como no, de como afrontar la intervención y como superar las secuelas que te pueden aparecer.

Después de leer esta “guía del Paciente” empece de verdad a saber a que me enfrentaba y entonces empezó mi trabajo de aceptación. A veces leo de nuevo esta guía ya que padezco las secuelas físicas y psicológicas del post-operatorio y  porque debo  prepararme para las nuevas intervenciones que me esperan de aquí a unos meses.